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Conversación con Nely Maldonado
En otras ocasiones hemos discutido algunas de las propuestas de autores como Paul B. Preciado o Judith Butler en torno a la hegemonía binaria de nuestras sociedades y su presencia en nuestra práctica. Sin embargo, no hemos platicado con las personas que se encuentran en primera fila. Es por esto que el sábado 30 de noviembre estaremos conversando con Nely Maldonado, quien nos ha hecho llegar una invitación para discutir y dialogar sobre su trabajo en la escuela con infancias y adolescencias no binarias, trans o disidentes. Aquí su propuesta:
La invitación a escribir sobre la figura del área de la consejería en la escuela, específicamente en torno a las infancias y adolescencias no binarias, trans o disidentes, me obligó a reflexionar sobre la propia situacionalidad de “la escuela” como tal, así como el lugar desde el que les docentes nos integramos al proceso educativo.
La escuela, como espacio material y como configuración simbólica, es sin duda un sitio de intercambio y formación, de socialización y aprendizaje. Los modelos que allí circulan atraviesan para siempre a les estudiantes; en este sentido, me parece que son incluso más potentes los modelos sociales y afectivos que en la escuela se despliegan e imponen, que aquéllos ligados al currículum temático.
La propia experiencia docente me ha conducido a pensar que gran parte de les profesores que estamos en las aulas no hemos tenido formación teórica o capacitación específica respecto a un rol que en muchas ocasiones debemos tomar. Un papel que va más allá de los contenidos y de los conocimientos “duros”, sino que tiene que ver con modelar formas de ser y actuar; orientar, aconsejar, acompañar, abrir experiencias. Es decir, dado que el espacio formal de la “consejería escolar” es inexistente en el sistema educativo mexicano, esa figura es muchas veces ocupada por les docentes.
Y entonces me llené de preguntas: ¿qué tanto quienes ejercemos la docencia estamos plenamente comprometides en la construcción de ambientes de aprendizaje verdaderamente integradores de todas las identidades y, en ese sentido, libres de violencia? ¿en qué medida nuestros propios prejuicios y creencias llegan a intervenir en nuestra práctica a tal punto que restringimos, limitamos y violentamos las subjetividades de les alumnes? ¿somos conscientes de que nuestro propio cuerpo y lenguaje despliegan modelos e imponen normativas sociales? ¿atendemos la equidad de género y la inclusión de las diversidades (étnicas, religiosas, sexuales, etc.) en la elección de temas, materiales didácticos, creación de dinámicas y demás planificaciones docentes? ¿castigamos/ permitimos/ propiciamos la disidencia y el cuestionamiento?
Esas y otras preguntas fueron atravesándome y atravesando la reflexión sobre el aula, la escuela, el ejercicio de desaprender para realmente aprender a acompañar y escuchar; es decir, para transformar eso que ocurre en el aula en una magia que potencie lo que cada infancia y adolescencia requiere ser.
Nely Maldonado
Conversación con Patricia Gherovici
En una entrevista sobre El antiedipo, Felix Guattari[1], subrayó la necesidad de ampliar la forma de pensar la experiencia del psicoanálisis, gracias a su estructuralismo, había quedado capturada como una experiencia constreñida a la dimensión enunciativa, y apelaba a los psicoanalistas a salir de sus consultorios; lo decía no solamente en sentido concreto y literal, sino también como una forma de plantear una salida incluso dentro del mismo consultorio.
El trabajo que Patricia Gherovici ha llevado a cabo en los Estados Unidos, a partir de la propuesta de Psicoanálisis en el barrio[2], que continúa la exploración ya presente en su libro El síndrome puertorriqueño[3], no solo nos recuerda las críticas[4] que Fanon llevó a cabo a la psiquiatría de su época en su texto Piel negra, máscaras blancas[5], sino que también podría considerarse como una manera de tomar la estafeta que Guattari lanzó en la entrevista que mencionamos anteriormente, cosa que le ha permitido encontrarse con dimensiones subjetivas sumamente enriquecedoras de la experiencia del análisis. Elementos como la racialización y la heteronormatividad, que durante años fueron excluidos de nuestra práctica -como si éstos no existiesen- aparecen como bucles clínicos de vital importancia en el trabajo en el barrio.
En palabras de Gherovici:
Mi estrategia ha sido dejar que mi experiencia clínica guíe mi producción teórica. Cuando la práctica desafió la teoría, revisé la teoría para dar cuenta de lo que encontré en la práctica. Utilizo diversos vehículos para difundir una integración del psicoanálisis con el pensamiento crítico. He aprendido mucho de mis pacientes. Al cuestionar nuestras nociones de raza, género, sexo e identidad sexual, desafiando la normatividad y los esencialismos, podemos reorientar productivamente la práctica psicoanalítica.[6]
[1] https://www.youtube.com/watch?v=QADvigKG5Mg
[2] http://www.pep-web.org/document.php?id=pepgrantvs.001.0010a
[3] Patricia Gherovici, El síndrome puertoriqueño, Ed. Siglo XXI, México, 2011.
[4] Frantz Fanon trabajó como psiquiatra en Argelia, de hecho fue director del hospital Blida, y no se cansó de denunciar la dimensión colonial de la psiquiatría de la época, puesto que los psiquiatras en Argelia calificaban de fantasías o delirios, los relatos de tortura de los pacientes, sin tomarse la molestía de otorgarles la más miníma posibiliad de verdad. Por otro lado, Piel negra, máscaras blancas es una respuesta al libro que habría publiado Octave Mannoni titulado Psicología del colonizado. Texto que vía la psicopatologización ratifica el concepto de raza, además formuló una crítica al estadio del espejo de Lacan, al subrayar la necesidad de contemplar elementos culturales que no podrían estar ausentes, según Fanon, en la formación del yo.
[5] Frantz Fanon, Piel negra, máscaras blancas. Ed. Akal, Madrid, 2009.
[6] Entrevista publicada en En el margen. Revista de psicoanálisis: https://enelmargen.com/2021/03/04/dos-preguntas-a-patricia-gherovici/
Sororidad y psicoanálisis: Una conversación con Silvia Lippi
e-dicciones justine conversa con Silvia Lippi, quien junto a Patrice Maniglier, viene de publicar Soeurs, Hermanas. Por un psicoanálisis feminista.[1]
Lippi y Maniglier nos invitan a repensar el psicoanálisis desde otra perspectiva, una que problematice nociones como falo, castración, sexuación y otras. Se trata de una invitación radical a “recomenzar” o “reiniciar” el psicoanálisis en el cruce con los feminismos.
“Lacan con Valerie Solanas”, podría también llamarse la apuesta. Solanas mujer, lesbiana, supuesta esquizofrénica que atacó a Andy Warhol y propuso el exterminio de los hombres. Tanto así que fundó SCUM (Sociedad de la Organización para el Exterminio del Hombre). La radicalidad de Solanas merece ser tomada en serio: algo de la masculinidad es irrecuperable, en tanto responde a sus condiciones de producción en un orden preciso y determinado que lxs autores nominan desde Derrida: falogocéntrico.
¿Será posible para las llamadas “mujeres” fugar de su producción subjetiva en relación con el hombre y con el falo? La apuesta de Lippi y Maniglier es a que sea posible, a partir de la producción de lo que llaman “síntoma compartido”, que el síntoma sea considerado no como manifestación de alguna enfermedad, sino como intento de cura. Al ser compartido devela la dimensión colectiva del sufrimiento, sin elidir los modos singulares con los que se manifiesta en cada mujer, o “mujer”.
La sororidad operaría como relación de hermandad entre mujeres y como lazo social otrx; lazo que podría permitir relecturas de casos como Dora o La joven homosexual en Freud entre otros efectos eventuales, sobre los hasta ahora considerados fundamentos del psicoanálisis.
De algo de todo esto conversaremos con Silvia Lippi.
[1] Silvia Lippi. Patrice Maniglier. Soeurs. Pour une psychanalyse féministe. Editions du Seuil, septiembre 2023; Paris.
Conversación con Lina Rovira
¿Es posible mantener las fórmulas de la sexuación de Lacan cuando nos encontramos en el seno de una clínica ampliada y atravesada por el antropoceno? ¿Qué necesidades lógico-políticas habilitan ese recorrido? ¿Es posible que la noción foucaultiana de instauradores de discursividad[1] acoja a Lacan y su discurso, de tal manera que incluya modificaciones, ampliaciones y corrimientos futuros?
Estas son algunas de las preguntas que están presentes en el libro de Lina Rovira. En los dos tomos de Impurezas conceptuales para una clínica ampliada en el antropoceno PSICOANÁLISIS – SUBJETIVIDAD Y PODER[2], nuestra autora se hace eco de Foucault:
Porque no queremos ser “los lamentables técnicos del deseo – los psicoanalistas y los semiólogos -que registran cada signo y cada síntoma y que quisieran reducir la múltiple organización del deseo a la ley binaria de la estructura y de la falta“. [3]
Y Rovira redobla la apuesta:
Nos atrevemos al riesgo de establecer nuevas conexiones, porque desear es justamente establecer esas conexiones. Y ellas apuntan a la tarea teórico-clínica de intentar reflexionar, indagar, encontrar, pedir prestado y producir herramientas teóricas y conceptualizaciones de las prácticas, que alojen las subjetividades fragilizadas y automatizadas de hoy, para abrirlas hacia una sensibilidad potente con la vida en todos sus modos de existencia, tanto humanes como no humanes, animales, vegetales, minerales, maquínicos, espectrales, etc.[4]
Lo ambicioso del proyecto de lectura parece equivaler a la urgencia de una época que exige cruces y afectaciones múltiples, así como revisiones de aquello que hemos considerado los fundamentos de nuestra praxis. Solo de ojear el índice de ambos tomos se acrecienta el deseo de este encuentro:
-Herramientas teórico-metodológicas para otros órdenes simbólicos posibles
-Una teoría de la psique que considere a la teoría del poder
-Foucault y Lacan, entre poder y sujeto
-El correlacionismo sujeto objeto. Ser un poco menos cartesianos y menos kantianos
-La salida del binario y el descentramiento del sujeto como centro de la escena
-“Ver, poder, saber y soñar más lejos”, con ayuda de Derrida y Davi Kopenawa… [5]
Algo de todo esto nos proponemos conversar con la autora.
[1] “Con instauradores de discursividad”, dice Foucault, “quiero decir que no sólo han hecho posible un cierto número de analogías, han hecho posible (y en igual medida) un cierto número de diferencias. Abrieron espacio a algo diferente de ellos, que sin embargo pertenece a lo que fundaron”. ¿Qué es un Autor? Michel Foucault (1969) Editado por ElSeminario.com.ar http://23118.psi.uba.ar/academica/carrerasdegrado/musicoterapia/informacion_adicional/311_escuelas_psicologicas/docs/Foucault_Que_autor.pdf
[2] Lina Rovira. Impurezas conceptuales para una clínica ampliada en el antropoceno PSICOANÁLISIS – SUBJETIVIDAD Y PODER. Ricardo Vergara Ediciones, BsAs 2023.
[3] Michel Foucault “Una introducción a la vida no fascista” como prólogo al Antiedipo. Capitalismo y esquizofrenia. Magazine Literaire , Paris 1988; traducción Ester Díaz.
[4] Lina Rovira. Impurezas conceptuales…op cit. p. 39.
[5] Ibidem., p. 9.
Conversación con Camila Joselevich
Es 10 de diciembre de 1974 y Lacan comienza su seminario “RSI”, luego de hacer referencia a su afiche y jugar con la homofonía entre R-S-I y la herejía (hérésie se leen las tres letras en francés[1]). Cincuenta años después nos preguntamos ¿En qué sentido se podría sostener que la enseñanza de Lacan tiene un costado herético? Recordemos que la noción de herejía nace con el cristianismo y que sigue arraigada a éste y que incluso gracias a la estigmatización del otro como hereje es que se pudo consolidar históricamente la doctrina cristiana.
Este es el tema central del libro que compiló y editó Camila Joselevich Aguilar: Heresiologías. Operaciones teológico políticas sobre la disidencia en la historia, el cual despliega a lo largo de los seis ensayos recopilados, la manera en cómo estas operaciones dieron vida a un tipo de discurso que buscaba trazar los límites de la doctrina verdadera, en la medida en que perfilaba a los maestros de lo falso. ¿Habrá sido esa también la intención de Lacan?
La experiencia del psicoanálisis es una experiencia muy peculiar que si bien se asienta en la existencia del inconsciente, no ha dejado de tener muy presentes referentes judeocristianos. En este mismo seminario Lacan sostiene que “lo que Freud instaura con su nombre del padre es idéntico a la realidad psíquica, a lo que él llama realidad psíquica, especialmente a la realidad religiosa -pues es exactamente lo mismo-.”[2] No deja de sorprender la equivalencia que establece entre realidad psíquica y realidad religiosa y no podemos menos que pensar en la insistencia de Lacan en soltar la figura del padre, pero ¿Es suficiente la herejía de sus tres registros, para mantener a raya una tradición de tantos años y con una clara tendencia hegemónica?
Conversaremos con Camila Joselevich sobre la confección de las heresiologías en Occidente, así como sobre las resonancias en la actualidad, particularmente en el psicoanálisis.
[1] La homofonía se pierde en español.
[2] Sesión del 11 de febrero de 1975. Versión en español de Rodríguez Ponte.
¿Y qué con la locura? V Conversación con Mariana Marques Moraes: «El loco Torre»
Desde 2016, fecha en la que organizamos un primer encuentro bajo el título ¿Y qué con la locura?,https://e-diccionesjustine-elp.net/y-que-con-la-locura/ venimos preguntándonos acerca de nuestra relación y la del psicoanálisis con aquello que se nombra como locura. Jacques Lacan exhortaba a no perder esa relación, que parecía considerar fundamental y fundadora de la práctica analítica. Por su parte Jean Allouch, en más de una ocasión localizó al psicoanálisis como “hijo de la locura”. ¿Qué alcance, tienen aún, hoy este modo de entender el vínculo locura/psicoanálisis y qué consecuencias se derivan de ello?
En esta ocasión conversaremos con Mariana Marques Moraes, cuya tesis de maestría: “El «loco Torre»: clínica de la psicosis y dimensión pública en el Uruguay de 1900-1920”, interroga algunos puntos de particular interés: locura, clínica de las psicosis y dimensión pública; y lo hace de manera situada, histórica y geopolíticamente.
La autora señala su designio como: “ (…) un análisis teórico, a través de un breve recorrido por parte de la teorización de Sigmund Freud y Jacques Lacan sobre locura y psicosis, buscamos también en ambos autores una posible teoría psicoanalítica sobre el público, en su relación con la psicosis. Posteriormente, realizamos un análisis histórico-discursivo de textos clínicos médico-psiquiátricos sobre psicosis — publicados en la Revista Médica del Uruguay— y noticias y artículos de prensa —de los diarios La Tribuna Popular, La Mañana, El Plata y La Razón— sobre locura. Asimismo, construimos un «caso paradigmático», el caso Alfredo Torre a partir del montaje y análisis de varios documentos sobre Torre: el texto clínico «Estado mental de A. T.» (1920), de Elio García Austt, noticias de diario y reportajes (1902-1920) a Torre, y el texto El problema universal. Su solución científica y filosófica (1907) de autoría de Torre. La presente investigación pretende realizar un aporte teórico y clínico, desde el psicoanálisis, al nuevo escenario y posible nuevo paradigma que está viviendo Uruguay desde la aprobación, en 2017, de una ley de salud mental en perspectiva de DD. HH.”
Se trata de una apuesta ambiciosa, de la cual esperamos obtener algunas pistas acerca de la pertinencia que estos asuntos tienen para el psicoanálisis.
Apuntes sobre la segregación I. Silenciar al apestado por Sergio Campbell
«El título de esta conversación», dice Sergio Campbell «está inspirado en diferentes acontecimientos sucedidos en la pandemia, que fue el momento en que fue escrito; sin embargo, va mucho más allá. Recordar, trasladar la memoria hasta mayo de 1957 cuando Lacan nos entrega su, un tanto anacrónica hoy, ley de segregación urinaria para grabarnos a fuego lo que de ahí devino enseñanza: que la segregación está en la lengua. Podríamos decir ahora que de ahí, de la lengua, parte, y como un virus, infecta toda actividad humana. También podríamos seguir el hilo de Lacan, y recordar cuando en 1967, en su Discurso a los psiquiatras, empieza hablando del loco y termina hablando de la segregación como el precio a pagar por el avance de la ciencia; y un año después, en la Proposición sobre el pase, cuando habla de los campos de exterminio».
La pregunta que nos surge a partir de las propuestas de Sergio que señalan la heterogeneidad de la naturalización que invisibiliza la traza histórica, no solo atañe a los mecanismos de naturalización de la segregación, sino también a las formas de las mismas. ¿Son iguales?, ¿hasta dónde se confunden o traslapan unas con las otras?
Hablaremos con Sergio de estos temas el sábado 16 de marzo.
Conversación con Andrés Cota Hiriart
¿Hay mundo por venir? Ensayo sobre los miedos y los fines es el título de un libro escrito por Deborah Danowski y Eduardo Viveiros de Castro que en 2020 nos incitó a pensar seriamente en otras formas subjetivas, no solo situadas a nivel cultural, como ya hemos venido haciendo siguiendo a Donna Haraway por ejemplo, sino situadas en un sentido mucho más orgánico, es decir en relación con “Gaia”. Éste es un término introducido por Lynn Margulis y James Lovelock para separarse de la tradición galileana de la isomorfía planetaria y poder hablar del globo como un organismo vivo gracias a las secuencias de acontecimientos generadas por la acción de microorganismos. De cierta manera, Margulis reivindica a Lamarck, pero considerando que las mutaciones de la evolución se deben no a la herencia en terminos de fenotipo, sino a la herencia de miles de microorganismos con sus respectivas variantes genéticas. A esto ella le llamó “symbiogenesis”.
Al tomar estos autores para pensar la dimensión subjetiva, estamos también señalando la caducidad de la noción de “mundo” atravesada por la división entre naturaleza-cultura, que ha hecho de éste un objeto controlable y manipulable, lo cual nos está llevando a vivir una de las peores crisis de nuestro tiempo. Se trata de una extinción masiva en el contexto de una época bautizada como la era del antropoceno.
En esta misma línea de pensamiento, acompañados de autores como Nick Land, Timothy Morton, entre otros, hemos invitado a Andrés Cota Hiriart quien es zoólogo y escritor, Biólogo por la U.N.A.M y Maestro en Comunicación de la Ciencia por Imperial College Londres. Es autor de Fieras Familiares (Finalista I Premio No ficción Libros del Asteroide 2022), El ajolote (Elefanta 2ª ed. 2022), Faunologías (Festina 2015), de la novela Cabeza Ajena (Moho 2017) y del libro infantil Madam Cuc, la dueña del paraíso (Elefanta 2023).
Discutiremos sobre la relación entre ficción y ciencia que se despliega en su último libro Fieras Familiares.
El rostro fijo de las perversiones. Tim Dean y Jorge N. Reitter
Tim Dean es autor de «Gary Snyder y el inconsciente americano» (1991), «Más allá de la sexualidad» (2000) e «Intimidad ilimitada» (2009). En este texto enfatiza la necesidad de volver sobre los orígenes y los usos del término perversión al interior del psicoanálisis.
Traducción de Jorge Reitter